Abanico Ochun

Descripción

El Abanico de Ochun es un fuerte elemento de protección.

Si hablamos de Ochun se trata de una poderosa mujer que aguarda energías de amor, sanación y abundancia económica. Si hablamos en positivo, pero si intentas burlarte de esta energía también existen severos castigos que puede emplear esta Orisha.

Te explicamos la importancia que tiene y de qué forma puedes utilizarlo para tu propio beneficio.

Elementos empleados para crear el Abanico Ochun

Existen un montón d elementos que se pueden utilizar para crear este abanico. En este caso ha sido creado con elementos naturales como hilos en colores amarillo y color bronce.

También se han tomado plumas de pavo real para darle fuerza a este poder. Ya que las aves eran los animales favoritos de Ochun.

¿Cómo utilizar el Abanico Ochun?

Si a través de la lectura ha salido Ochun como tu protectora ten en cuenta de que forma podrías emplear este abanico de manera positiva:

Nota: Este abanico debe estar en la olla con todas las ofrendas para preservar su energía y protección.

1. Trata de tener siempre a la mano elementos como la miel, canela, el sándalo y velas. Son las ofrendas principales en su solicitud. Y aquí es donde el abanico juega un papel importante. Al hacer esta ofrenda pasarás por todo tu cuerpo y aura el abanico. Esto reestablecerá el equilibrio natural de tu energía y las malas que pudiste recoger en el medio ambiente donde te desenvuelves.
2. Una vez que el abanico se encuentre lo suficientemente recargado podrás impregnar de el a cualquier persona que consideres cercana a ti o de mayor afecto.
3. Emplea unas gotas de perfume de Ochun y rodéate del abanico. Una vez te encuentres preparada comienza con tus peticiones y deja nuevamente reposar en su altar.

Recomendaciones finales con el abanico

No en todos los casos quiere decir que el hechizo no funcionó. Si la solicitud que hiciste no se llevó a cabo quiere decir que algo mejor te espera. Por ello es muy importante también comprender que no tenemos el control total de lo que deseamos ni todo lo que deseamos es precisamente lo que merecemos.